El establecimiento de la microbiota intestinal en la vida temprana juega un papel importante en el desarrollo de los peces e influye en el estado de salud y el rendimiento del crecimiento del huésped.
El efecto de diferentes condiciones de crianza puede tener un impacto en la colonización inicial de la microbiota intestinal, mientras que la adición de probióticos también puede afectar dicha colonización.
Sin embargo, la forma en que esto puede afectar la supervivencia y el crecimiento de las larvas de peces permanece en gran parte sin explorar.
En este escenario, un reciente estudio realizado por investigadores del Grupo de Acuicultura y Pesca, de la Universidad de Wageningen (Países Bajos), publicado en la Revista Aquaculture, plantearon la hipótesis de que las larvas de tilapia criadas en RAS desarrollarán una microbiota intestinal diferente y mostrarán una mejor supervivencia y crecimiento que las criadas en FTS.
Para probar su hipótesis, incubaron embriones de tilapia del Nilo de 3 días hasta 9 días después de la fertilización (dpf) en tres sistemas, incluido un sistema de flujo abierto (FTS) y dos sistemas de recirculación de acuicultura (RAS) idénticos.
Cuando la alimentación comenzó a los 10 dpf, las larvas de tilapia en el FTS y en uno de los RAS se alimentaron con una dieta de control, mientras que las larvas en el segundo RAS se alimentaron con la dieta de control recubierta con Esporas de B. subtilis (RASB).
La prueba de alimentación duró 26 días, desde la larva hasta la etapa de alevines, durante los cuales se analizó la supervivencia, el rendimiento del crecimiento y la microbiota intestinal.
De acuerdo con los resultados del estudio, las larvas criadas en FTS mostraron una supervivencia significativamente menor que las de RAS y RASB, mientras que no se observaron diferencias en el crecimiento de los peces y la tasa de conversión aparente de alimento entre tratamientos.
Además, el estudio reveló que los diferentes sistemas de cría dieron como resultado diferentes composiciones de bacterias intestinales que se correlacionaron fuertemente con la tasa de supervivencia y la longitud corporal estándar en el momento de la cosecha.
En este escenario, Cetobacterium se detectó en RAS y RASB, mientras que apenas se detectó en el intestino de alevines de tilapia criados con FTS. “La suplementación con probióticos aumentó la abundancia relativa de Bacillus beneficioso en dl intestino de los peces. Nuestros hallazgos indican que la cría de larvas de peces en RAS respalda una mejor supervivencia en comparación con FTS, mientras que la suplementación con probióticos dietéticos modula aún más la composición bacteriana intestinal y estimula la presencia de bacterias beneficiosas durante la vida temprana”, concluyeron los investigadores.
Aquí puede acceder al texto completo del estudio.